Únete a nuestra comunidad
Toda la actualidad del mundo de la salud y la farmacia en Consejos de tu Farmacéutico.
Además, puedes seguirnos en nuestras redes sociales:
Los dos grandes retos que tienen los profesionales de adicciones y patología dual son, por un lado, la detección de las enfermedades infecciosas de VIH y hepatitis C en estos pacientes y, por otro, su remisión exitosa para una correcta derivación a los especialistas en hepatología e infecciosas. Esta es la principal conclusión que se ha extraído de la celebración de la Jornada sobre el manejo actual de la infección por VHC y/o VIH en pacientes con adicciones a sustancias y patología dual, organizada por la Sociedad Española de Patología Dual (SEPD) en colaboración con MSD.
En nuestro país el porcentaje de pacientes con adicciones y con patología dual que están infectados por el virus de la hepatitis C (VHC) es del 70%, pero se estima que son más. De acuerdo al Dr. Juan Arenas, especialista en hepatología del Hospital Universitario Donostia, no todos los pacientes están controlados en las unidades de hepatología. “Deberíamos hacer un esfuerzo en diagnosticar al 25% de estos pacientes que todavía no saben que tienen hepatitis C”, advierte.
En la misma línea se ha pronunciado el Dr. Carlos Roncero, vicepresidente de la Sociedad Española de Patología Dual (SEPD) y jefe de sección de Adicciones y Patología Dual del Hospital Universitario Valle de Hebrón de Barcelona. Durante su ponencia sobre la relevancia epidemiológica de la infección por VHC y coinfección VIH/VHC en pacientes adictos y duales, ha destacado que este porcentaje elevado que desconoce su estado serológico supone un reto para los profesionales, para poder hacer screaning y detección en todos ellos”.
En este sentido, ha presentado resultados preliminares del estudio “Proteus”, con una población representativa de 624 pacientes dependientes a opiáceos procedentes de 74 centros de asistencia al dependiente de opiáceos de toda España, en el que se destaca que hay un porcentaje importante de pacientes con adicciones con infección por hepatitis C y VIH. “De estos, más de un 30% son VIH positivos, más de un 75% son positivos en el virus C, alrededor del 20% tienen coinfección, y aproximadamente el 70% tenían patología dual. Además de adicción a opiáceos, los otros trastornos mentales fueron mayoritariamente ansiedad, depresión y trastornos del sueño”, matiza.
Debido a la relevancia epidemiológica, por su gran prevalencia, se hace imprescindible la detección y remisión exitosa entre unidades de especialización para identificar a estos pacientes, estableciendo y manteniendo la alianza terapéutica entre especialistas en adicciones y en infecciosas, y favoreciendo el cumplimiento farmacológico y la adhesión terapéutica. “Hay que facilitar la llegada de los pacientes y que acepten el tratamiento. Uno de los problemas importantes para poder tratar a estos pacientes es tanto la detección, mediante screaning y analíticas de sangre, como que después se puedan remitir desde las unidades de adicciones a las de hepatolgía, enfermedades infecciosas, etc.”, asevera.