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Existen distintos tipos de celulitis y cada uno necesita un abordaje concreto
Sin duda, el anticelulítico es el cosmético estrella en este momento, ya que actúa en diferentes frentes,contra los distintos tipos de celulitis, con fórmulas cada vez más adaptadas al comportamiento del adipocito (célula grasa) y texturas muy ligeras. La farmacéutica Laura Granados, responsable de bienestar de Spirit SkinBar, en Madrid, un nuevo espacio que fusiona el diagnóstico por parte de los profesionales farmacéuticos con servicios de tratamientos estéticos, explica que “los anticelulíticos combinan activos liporreductores (quemagrasas, como la cafeína) e inhibidores de la acumulación de grasa (evitando que crezcan los adipocitos existentes y que aparezcan otros nuevos), para así luchar contra el aspecto acolchado de la piel. También incluyen activos reafirmantes que tratan la flacidez asociada a la celulitis, ya que este problema disminuye la síntesis de las fibras de colágeno”.
Granados recomienda usarlos a diario, ya que pueden adaptarse en función de las necesidades del paciente (uso nocturno diurno o ambos), asociados a una exfoliación corporal semanal (en cabina o en casa). La mayoría de los lanzamientos de este año tienen una característica en común: están formulados para actuar durante la noche, con activos adaptados a los ritmos circadianos del organismo. De esta forma, favorecen la eliminación del exceso de líquidos cutáneos, reducen la hinchazón y actúan sobre determinadas proteínas que actúan con “nocturnidad”, induciendo la proliferación de adipocitos y favoreciendo la acumulación de grasas.
Tipos de celulitis
Laura Granados explica que la celulitis se puede desarrollar en distintos grados, cada uno de los cuales necesita un tipo de abordaje:
-Grado I: es la celulitis incipiente, en la que existe una alteración circulatoria que contribuye a la retención de líquidos, con el consiguiente edema (inflamación) conectivo. “La piel está lisa a simple vista pero presenta una ligera ondulación al pellizcarla. Una buena forma de prevención consiste en añadir unas gotas de aceite de aguacate a la hidratante corporal diaria, e ingerir complementos de piña, rusco, etc. que estimulen la circulación”.
-Grado II: al aplicar presión sobre la zona ya aparece la piel de naranja. Los glúteos suelen ser los más afectados y hay más edema con acumulación de grasa y fibrosis intersticial. Es el momento de emplear productos anticelulíticos que incluyan entre sus ingredientes cafeína, drenantes y estimuladores de la circulación.
-Grado III: suele afectar a muslos, glúteos, brazos y cartucheras (acumulación de exceso de grasa) y la piel se ve flácida. “Es una celulitis que a veces no se percibe en posición acostada y en la que la inflamación es mucho más evidente, aparecen nódulos de grasa que se aprecian a simple vista y se empiezan a agrupar en micronódulos duros. Los masajes y tratamientos anticelulíticos profesionales ayudan a romper estos micronódulos, movilizar las grasas y drenar los líquidos. Se aconsejan los complementos de té verde, útil para el metabolismo del tejido adiposo, y semillas de uva, con propiedades antioxidantes y favorecedoras de la microcirculación, así como anticelulíticos con altas concentraciones de cafeína, que estimulen la formación de colágeno para tratar la flacidez asociada y la quema de grasas”.
-Grado IV: en este grado ya aparece dolor al roce y la celulitis es visible incluso en reposo. La circulación está muy afectada y aparece mucho edema y retención de líquidos. “Se recomienda incluir en la dieta un complemento rico en algas, que actúan en el origen de las grasas, y activos que mejoren la circulación, además de anticelulíticos con altas concentraciones de cafeína”.