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“Hasta ahora la única forma de regular el sueño de un bebé era regulando sus hábitos. Ahora hemos descubierto una nueva manera” ha anunciado el doctor Eduard Estivill, director de la Clínica del Sueño Dr. Estivill del Instituto Universitario Santiago Dexeus, en referencia a los últimos estudios que apuntan una relación directa entre crononutrición y sueño.
La crononutrición se refiere a la elección de los alimentos que se ingieren en cada momento del día y de la noche, para contribuir a un correcto funcionamiento de los ritmos biológicos del organismo, como es el caso del ciclo sueño/vigilia. El conocimiento de estos mecanismos del organismo puede aportar soluciones para combatir problemas de sueño en colectivos como ancianos y niños. Así lo han puesto de manifiesto diversos expertos durante la mesa redonda Crononutrición, alimentación y sueño que se ha celebrado en el marco de la 9ª edición del Congreso Europeo de Oficina de Farmacia (Infarma 2009).
Este es el caso de la alimentación infantil. “La leche materna es la crononutrición más perfecta que existe” apunta la doctora Carmen Barriga, catedrática de fisiología de la Universidad de Extremadura. La doctora ha dirigido un estudio que muestra como este alimento varía su composición a lo largo del día para adaptar sus componentes a los diferentes ritmos biológicos de nuestro organismo de vigilia y sueño. A partir de las 18:00 horas se produce un aumento en la segregación de un aminoácido, el triptófano, que favorece la síntesis de la serotonina, produciendo una sensación de relajación que se eleva durante el periodo nocturno para favorecer el sueño.
Los resultados de la investigación dirigida por la doctora Barriga, apuntan que las leches artificiales que integran diferentes componentes en función de la hora de la toma, imitando la materna, favorecen la regulación de los procesos de vigilia/sueño de una manera significativa. De esta forma, estos productos pueden aportar mayores beneficios para un óptimo desarrollo del bebé.
El sueño, un factor clave en el desarrollo del bebé
“El insomnio infantil afecta al 53% de los lactantes entre los cinco y once meses de vida” señala la doctora Montserrat Rivero, directora general científica del Grupo Ordesa. La compañía, experta en nutrición infantil, ha desarrollado una gama de leches artificiales basadas en estos estudios que imitan la función de la leche materna durante el ciclo día y noche.
Los problemas del sueño pueden ser determinantes en las primeras etapas de la vida, “de hecho los niños que han tenido problemas de sueño en el periodo lactante, tienen tres veces más problemas de insomnio a los cinco años” explica la doctora Rivero. Un factor que directamente afecta a su desarrollo, ya que es durante ese tiempo del día cuando el organismo del niño experimenta una mayor actividad de crecimiento y desarrollo, se produce la reparación cerebral y la restauración del sistema inmunitario” como añade el Dr. Estivill.
Por su parte Carlos Buesa, consejero delegado de Oryzon Genomics, participante también en el estudio, ha destacado el importante papel de la nutrigenómica para demostrar que los alimentos “más allá de proporcionar energía pueden desarrollar otras capacidades, que pueden llegar a alterar la expresión de nuestros genes haciendo que unos se expresen más que otros y regular las funciones de nuestro organismo”. Un conocimiento que nos puede permitir mejorar nuestra salud favoreciendo los procesos naturales del organismo a través de una correcta alimentación.