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La ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, ha señalado que, salvo que cambie el proceso de extensión de la enfermedad, «para evitar acopio de antivirales y para prevenir un consumo sin control que cree reacciones no previstas, estos medicamentos se seguirán administrando desde los hospitales».
No obstante, varias autonomías han acordado con sus COF protocolos de intervención y medidas para dispensarlos si fuera necesario. Y es que diversas administraciones y COF han llegado a la conclusión de que, cuando en otoño la epidemia se agrave, «contar con la red de farmacias será fundamental» y están preparando ese escenario. De hecho, ya en abril, la presidenta del Consejo General de COF, Carmen Peña, presentó a la ministra de Sanidad un plan de dispensación segura de antivirales basado en el modelo con el se dispensan los estupefacientes, «lo que garantizaría el control y haría imposible el acopio», asegura Peña a CF.
Aragón, Extremadura, Valencia o Canarias han hecho ya planes
Cataluña cuenta con un protocolo que le permite filtrar enfermos de gripe A en las boticas.
Segú las declaraciones de Juan Carlos Gimeno, presidente del COF de Zaragoza, a Correo Farmacéutico, «los antivirales deberían dispensarse en las farmacias», pero entretanto Aragón ha puesto en marcha un protocolo de atención especial de sus oficinas de farmacia para aconsejar y orientar a los pacientes sobre la epidemia de gripe A.
En la misma dirección, la Comunidad Valenciana pondrá en marcha un plan con los COF para que las farmacias se doten de suficientes mascarillas y útiles de higiene, se preparen para informar a los pacientes sobre la gripe A y colaboren con la Administración en cada fase de evolución de la epidemia.
Cataluña, por delante
Cataluña irá un paso por delante, ya que tiene un plan de atención contra la gripe común desde hace años mediante el cual atiende y deriva al médico de primaria a los pacientes. Ahora aplicará el mismo protocolo a las personas suscptibles de tener la gripe A. Las farmacias catalanas disponen de un protocolo de detección de síntomas, que funciona cada año contra la gripe común, y que permite atender a los pacientes y derivar al médicos los casos graves, con lo cual se aligera la presión sobre la atención primaria.
Este protocolo va a seguirse también contra la gripe A y para ello se han impartido recomendaciones a todas las oficinas de farmacia tanto para el uso interno de los profesionales como para su relación con los pacientes. Incluye un test que permite filtrar a los pacientes y derivarlos al médico cuando sea necesario.
En Canarias, el nuevo director general de farmacia, Buenaventura Fernández, considera que «es casi inevitable que en octubre o noviembre, cuando la epidemia esté en su punto de máxima expansión, las oficinas de farmacia estén en la red de distribución de los antivirales». Fernández dice que la Administración canaria ya está preparando, junto con los COF de la región, un decreto para poner en marcha este mecanismo de actuación.
El plan canario
Mientras eso ocurre, la semana pasada el nuevo director general, Buenaventura Fernández, presentó junto a los presidentes de los COF de la región el Plan de Actuación de las Oficinas de Farmacia de Preparación y Respuesta ante una Pandemia de Gripe A. El plan canario consiste en un manual interno de precauciones a cumplir por profesionales y empleados de la oficina de farmacia, una guía con las recomendaciones generales fijadas por Sanidad para informar a los pacientes y resolverles dudas y una guía para detectar posibles casos de gripe A y dar a los pacientes pautas sobre cuándo deben acudir al médico.