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A sus 24 años, esta chica de expresión dulce y serena, se transformó para interpretar la compleja personalidad de Juana La Loca, un trabajo que le valió un Goya, el premio más importante en la cinematografía española. Ahora, inundará las pantallas de televisión durantes las fiestas de Navidad protagonizando la ya tradicional campaña de Freixenet.
Desde muy joven soñaba con ser actriz y a los 15 años acudía a los castings para hacer realidad sus aspiraciones. Su debut se produjo en la serie de televisión Yo, una mujer en la que interpretaba a la hija de Concha Velasco. A partir de ahí, se le presentaron distintas oportunidades, pero fue la serie Al salir de la clase la que la hizo popular con su personaje de Carlota. Y después vino el cine, se vislumbró su potencial como actriz en Besos para todos de Jaime Chavarri, cinta con la que la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas la nominó al Goya como mejor actriz revelación. No lo consiguió, pero su recompensa no tardaría en llegar. Vicente Aranda le dio la oportunidad de interpretar a la reina de Castilla y León. Su excelente trabajo le valió la Concha de Plata a la mejor actriz en San Sebastián y el preciado Goya. Preparó su interpretación concienzudamente y supo aprovechar su oportunidad en el papel de esta mujer atormentada: «Lo di todo por Juana ?declaró la actriz tras conseguir el premio- creo que hay pocos papeles de mujer fuerte para una chica de mi edad». Luego vendría un periodo de merecido descanso durante el que asimilar todo lo sucedido «hasta que llegue un proyecto que realmente me enloquezca».
¿Y como afectó el éxito alcanzado, la fama, la popularidad, a una joven de 24 años? La actriz reconoce que la ha hecho cambiar: «Con todo lo que ha sucedido con Juana la Loca, como para no haber cambiado. Pero los cambios no tienen por qué ser negativos. Ahora me estoy acomodando y empiezo a digerir las cosas. La popularidad te condiciona en muchos sentidos; esto de la fama puede afectar a tu vida, a tus actos, y hasta puede llegar a transformarte el carácter. Algo me ha debido de cambiar, porque es lo normal». «La popularidad me ha hecho más pequeñita, más tímida.»
Se habla ahora de incursión en el mercado cinematográfico americano siguiendo la estela de actores como Antonio Banderas o Penélope Cruz. Pilar López de Ayala no quiere perder esta oportunidad, aunque tampoco hacer demasiadas concesiones para lograr este objetivo. «Nunca sacrificaría mi vida personal y sentimental para llegar a triunfar». Y mientrasposibles producciones en Hollywood la esperan,la veremos de nuevoporque ha sido la elegida para protagonizar el spot publicitario de la campaña navideña de Freixenet: «Me lo he pasado fenomenal durante todo el rodaje. Creo que este año el spot va a ser diferente a lo que han hecho antes, porque será la primera vez que no aparezca una estrella…»
Muy celosa de su intimidad, apenas habla de su vida privada, le gusta pasear por su ciudad, Madrid, escuchar música, leer o ir al cine y salir con sus amigos, gustos sencillos, y cuando no la vemos en galas o grandes eventos viste de modo informal. «Me pongo unos vaqueros y una camiseta y estoy lista. No me preocupo demasiado de la ropa, porque en el fondo tampoco quiero que me preocupe tanto», declara la actriz.
Es autoexigente y se confiesa tímida, detesta la hipocresía, la falsedad y las apariencias y, sobre todo, es una entusiasta de su profesión «Esta vida te engancha, crea una adicción: llega un momento en que no puedes dejar de sorprenderte cada día.»