Únete a nuestra comunidad
Toda la actualidad del mundo de la salud y la farmacia en Consejos de tu Farmacéutico.
Además, puedes seguirnos en nuestras redes sociales:
Todo lo que invita al desarrollo neurológico del niño
1. Además del sueño, la calidad del aire influye en la maduración cerebral de los menores. De hecho, la contaminación urbana influye negativamente en la maduración cerebral de los escolares. Según un estudio realizado entre un subgrupo de 263 niños de 8-12 años que participaban en el estudio BREATHE, se demostró que una mayor concentración de contaminantes se relacionaba con una menor maduración funcional de las redes cerebrales clave para la integración de la actividad intelectual.
2. Dejar a un lado las pantallas. Según recoge la Academia Americana de Pediatría en su última actualización del informe sobre el uso de tecnologías en menores de dos años, la televisión o el uso de pantallas táctiles y aplicaciones a edades tan tempranas podían tener efectos negativos en los pequeños y la evidencia sobre los beneficios de estos dispositivos a estas edades es limitada. El uso inapropiado de las nuevas tecnologías en niños altera su desarrollo cognitivo, social y emocional. Los pediatras advierten de la importancia de la supervisión por parte de los adultos durante el uso de las nuevas tecnologías, así como del uso de programas o aplicaciones de buena calidad.
3. El ejercicio: tal y como explica el doctor Jaime García Aguado, pediatra de Atención Primaria y miembro del grupo Prevención en la Infancia y la adolescencia (Previnfad) de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap), el uso de pantallas, además de disminuir las horas de sueño y alterar el desarrollo cognitivo, social y emocional, está aumentando el sedentarismo en los menores y el Índice de Masa Corporal (IMC). Por lo tanto, hacer ejercicio físico de forma regular puede ayudar a conciliar el sueño nocturno, aunque no es recomendable en las horas previas a irse a la cama.
4. Leer en voz alta. Fomentar la lectura en voz alta, alternativa que proponen desde la AEPap, contribuye a mejorar el lenguaje, la imaginación, el desarrollo cognitivo de los niños y crea lazos afectivos con los padres.
5. Evitar tomar bebidas estimulantes o chocolate, sobre todo por la tarde y noche.
6. Dormir la siesta… no más de 30 minutos. Si se duerme siesta, debe ser corta (30) y a primera hora de la tarde.
7. El tabaco tiene efectos nocivos sobre el sueño, no expongas a tu hijo al tabaquismo pasivo.
8. Crear buen ambiente. Es bueno promover un ambiente favorable para el sueño en el hogar al final de la tarde y en las primeras horas de la noche. Bajar la intensidad de las luces antes de ir a dormir y controlar la temperatura en los dormitorios puede ayudar.
9. Enseñar a los niños a relajarse y a expresar sus emociones favorece el sueño y evita situaciones estresantes. No hay nada como conocerse a uno mismo y aceptarse desde pequeñitos.
Trastorno por videojuegos
Una enfermedad de nuevo cuño
La OMS ha anunciado que incluirá en su Clasificación Internacional de Enfermedades (ICD-11) el trastorno por videojuegos como enfermedad mental, que se caracteriza por un comportamiento de juego continuo y recurrente vinculado a 3 condiciones negativas:
1. No controlar la conducta de juego en cuanto a frecuencia, duración, intensidad o contexto;
2. Incremento de la prioridad que se le otorga al juego frente a otros intereses o actividades de ocio o diarias;
3. Mantenimiento de la conducta o progresión de la misma a pesar de percibir las consecuencias negativas del juego