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La Coordinadora Española de Asociaciones de Espondiloartritis (CEADE) y la Asociación Española de Pacientes de Psoriasis, Artritis Psoriásica y Familiares (ACCIÓN PSORIASIS) han puesto en marcha una encuesta con el fin de detectar el grado de conocimiento que tienen los pacientes sobre las manifestaciones extraarticulares asociadas a su patología, así como cifrar su impacto en su calidad de vida. El objetivo es conocer la globalidad de enfermedades como la psoriasis y la espondiloartritis y saber el grado en el que éstas afectan a los pacientes más allá de los síntomas articulares y/o de la piel.
Por este motivo, este cuestionario también resultará de gran utilidad a la hora de mejorar la identificación precoz de estas patologías y sus comorbilidades: “Es importante que el diagnóstico se haga en el menor tiempo posible porque esto ayuda a establecer el tratamiento adecuado en fases tempranas. Además, recibir a pacientes mejor informados sobre sus patologías nos ayudará a mejorar el diagnóstico precoz de la enfermedad, y por tanto, a minimizar su impacto en la calidad de vida del paciente”, explica el doctor Xavier Juanola, reumatólogo del Hospital Universitario de Bellvitge.
Manifestaciones asociadas, que van más allá y complican el curso de la enfermedad
Tanto la psoriasis como la espondiloartritis son patologías crónicas, cuyas manifestaciones asociadas pueden complicar el curso de la enfermedad si no se controlan a tiempo, ya que en ocasiones pasan desapercibidas. De hecho, 1 de cada 3 pacientes con psoriasis podría desarrollar artritis psoriásica. Sin embargo, muchos pacientes con psoriasis no relacionan la psoriasis con la artritis y pasan por alto síntomas como la inflamación o dolor articular por desconocer que éstos podrían estar relacionados con su enfermedad y tratarse en realidad de una artritis psoriásica (APs). Un paciente con APs tarda una media de 5 años desde que tiene el primer síntoma articular hasta que es correctamente diagnosticado.
En este sentido, Santiago Alfonso, director de Acción Psoriasis, destaca: “esta encuesta nos puede ayudar a dimensionar, desde la perspectiva del paciente, el conocimiento y la existencia de estas manifestaciones. Los pacientes de artritis psoriásica, a menudo, no saben que si se presentan por ejemplo complicaciones o dolencias a nivel digestivo, estos síntomas puedan tener relación con la artritis psoriásica y por ello, a veces, podemos pasarlos por alto y no darles la importancia que tienen. Es por este motivo que desde Acción Psoriasis informamos al paciente, le aconsejamos que esté alerta ante determinadas molestias para que acuda lo antes posible a su especialista”.
Asimismo, los síntomas relacionados con las espondiloartritis y la artritis psoriásica van desde afecciones oculares e intestinales, en forma de enfermedades asociadas como la uveítis y la enfermedad inflamatoria intestinal, a problemas hepáticos, renales o cardiovasculares. En ocasiones, estos síntomas pueden tener consecuencias graves si no se controlan a tiempo, como es el caso de la uveítis, que puede llegar a causar ceguera en sus formas más agresivas. En este sentido, cobra especial importancia el abordaje entre distintos especialistas durante el curso de la enfermedad, como asegura el Dr. Juanola: “Un manejo conjunto entre oftalmólogos, dermatólogos y gastroenterólogos no sólo puede favorecer el pronóstico en las enfermedades reumáticas, sino la percepción del paciente, que recibe un seguimiento más coordinado y por tanto, una atención más completa”.
Manejo conjunto entre paciente y especialista, clave para el pronóstico de la enfermedad
Entre los objetivos de este estudio, que consta de 24 preguntas y cuyos resultados serán publicados en los próximos meses, se encuentra también fomentar un mayor conocimiento de los pacientes hacia su patología, y en consecuencia, potenciar el autocuidado y la confianza de estas personas en el manejo de su enfermedad. Es decir, fomentar un papel activo del paciente para involucrarle en la detección temprana de los síntomas y en el seguimiento del curso de su patología.