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Dormir bien es una necesidad fisiológica tal como puede ser comer y respirar, pero a la que no se le da la importancia adecuada. El sueño nos ayuda a descansar y reparar las funciones cognitivas para poder estar activos al día siguiente y tener vitalidad y energía suficientes. El sueño no reparador y de mala calidad se ha convertido en un problema para muchos de los ciudadanos en los últimos años provocando importantes consecuencias en la salud de quienes lo padecen.
La falta de sueño o los trastornos del sueño, tales como el insomnio, son enfermedades importantes, independientes y graves que requieren de un diagnóstico, tratamiento y seguimiento específicos y adecuados para evitar que se produzcan consecuencias o comorbilidades mayores. Por ello, es importante el reconocimiento del insomnio crónico como una enfermedad independiente que requiere un manejo y tratamiento específicos y adecuados.
Las características sociales actuales han hecho que nos enfrentemos a días con largas jornadas, muy ocupados, superprogramados y sobrecargados de actividades, situación que afecta al tiempo y a la calidad del sueño. Ir a la cama se ha convertido en todo un reto para el ciudadano y controlar la hiperactivación cerebral antes de dormir y los ciclos de sueño-vigilia una misión casi imposible en el día a día. Esta alteración de los ciclos de sueño-vigilia, producida por estas jornadas y por el estado de hiperactivación neurológica que afecta a la cantidad y calidad de sueño que se precisa, afecta de forma considerable al nivel de energía y funcional del día después, tanto en el plano emocional-afectivo (aumento de irritabilidad, nivel de agresividad y tolerancia), en el plano social (dificultades para relacionarse, conductas desajustadas), en el rendimiento cognitivo (problemas de atención y memoria, dificultades para resolución de problemas), en la salud, produciendo comorbilidades como ansiedad, depresión, diabetes, obesidad, diversos trastornos cardiovasculares, respiratorios, gastrointestinales, urinarios y neurológicos a largo plazo.
Esta situación ha desencadenado en que, en nuestra sociedad, los trastornos de sueño constituyan un importante problema de salud pública. La población no es consciente de la importancia de un descanso suficiente y de calidad, por lo que se han ido restando horas de sueño para dedicarlas a trabajo, ocio u otras actividades, reduciendo el número de horas de sueño. Esto produce importantes alteraciones en nuestro organismo y nuestros ritmos circadianos, además de dejar huellas negativas en nuestra salud.
En datos epidemiológicos publicados en España sobre insomnio crónico en mayores de 18 años, que es la expresión más grave de la enfermedad, en los últimos 20 años se ha duplicado la presencia de esta patología, representando actualmente entre el 6-14% de la población, y el 43% de la población, es decir casi 1 de cada 2 españoles, tiene síntomas de insomnio, la forma más leve. En población infantojuvenil, en los menores de 18 años, en donde el sueño es especialmente relevante si cabe en esta población por el desarrollo neurológico, físico, cognitivo y emocional, por su salud y la salud de su futuro, las cifras muestran que 4 de cada 10 menores de entre los 8 y 16 años, no cumplen con las recomendaciones de horas de sueño de lunes a viernes, una realidad que se acentúa sobre todo a los adolescentes, ya que más de la mitad de ellos duerme menos de 7-8 horas.
Enfermedad de 24 horas
Además, el insomnio es una enfermedad de 24 horas que afecta a la noche y al día de quienes lo padecen, ya que al problema de sueño nocturno se asocia a una somnolencia diurna que afecta a la actividad diaria, provocando cansancio, fatiga, irritabilidad, incapacidad de gestionar emociones y otros problemas de salud relacionados y tienen un alto impacto en calidad de vida y en su día a día de las personas que lo sufren. El insomnio tiene una relación bidireccional con la ansiedad y la depresión y es un factor de riesgo de suicidio. Para los pacientes, el día siguiente a las noches de insomnio se convierte en un problema mayor incluso que la noche, ya que la falta de descanso les afecta en su vida personal y laboral: “Cuando no descanso por la noche, al día siguiente me siento mucho más desanimada, irascible y cansada. Esto me afecta a mi carácter y a la forma de llevar a cabo mi trabajo y mis relaciones personales”, explica una paciente con insomnio.
Por ello, es importante consultar con un especialista que pueda hacer una historia clínica y realizar un diagnóstico correcto al paciente. A pesar de que el insomnio crónico se ha convertido en los últimos años en una de las condiciones médicas más comunes y que generan más consultas, se trata de una de las grandes olvidadas en la medicina. Además, muchos pacientes reconocen no acudir al médico para consultar el problema, retrasando así el diagnóstico y tratamiento y, por tanto, agravando la situación y las consecuencias de la falta de sueño. “Es importante que los pacientes, ante cualquier síntoma de trastorno del sueño, acudamos al médico para consultar esta situación y que puedan realizarnos un diagnóstico sobre la historia del sueño que permita realizar un buen abordaje clínico y terapéutico de la enfermedad. También debemos seguir unas pautas de higiene del sueño, de eliminación de consumo de sustancias tóxicas y adoptar hábitos y rutinas imprescindibles, tales como respetar los ritmos circadianos, no utilizar pantallas durante la noche, etc., para que éste sea verdaderamente restaurador y se pueda disfrutar de una buena calidad de vida y bienestar emocional”, afirma Raquel, paciente con insomnio.
Encontrar información fiable y comprensible en internet
En este sentido, la web redefineinsomnio.es se constituye como una herramienta para todas las personas que sufren las consecuencias del insomnio, proporcionando información relevante, actualizada y comprensible sobre esta enfermedad.
El portal web se organiza mediante dos grandes bloques de contenido. Por un lado, se explica a través de un vídeo muy didáctico e ilustrativo qué supone para una persona vivir con insomnio crónico. Además, se exponen las causas que pueden propiciar la aparición del insomnio y su relación con la hiperactividad de nuestro cerebro durante la noche.
Por otro lado, se presenta un apartado que conecta de manera cercana con los usuarios que visitan la web, a través de información sencilla y útil para entender qué es el insomnio, cuáles son las diferencias entre insomnio agudo y crónico y qué papel juega un cerebro hiperactivo cuando se padece insomnio crónico. De igual modo, se especifica como afecta el insomnio crónico durante el día y qué síntomas nocturnos alertan del mismo.
De acuerdo con el alcance y las características de esta enfermedad, la web subraya la necesidad de acudir a un profesional médico siempre que cualquier persona se sienta identificada con los síntomas o las situaciones presentadas acerca del insomnio. El conocimiento del insomnio y de sus efectos es el principal cometido de esta iniciativa, la cual pretende constituirse como una plataforma provechosa para toda la población ante el grave problema que conlleva el insomnio entre los españoles.