depresion sonriente

Según los expertos de la UOC, la llamada “dictadura de la felicidad” que se impone en redes sociales, puede influir a la hora de intentar ocultar una depresión en personas muy perfeccionistas. Se conoce como depresión sonriente y socava la integridad de quien la sufre. En el mes de la Salud Mental ponemos el foco sobre esta realidad que preocupa cada día más a los expertos.

“¡Con lo alegre que se le veía!” “¡Si parecía que todo le iba estupendamente!” Expresiones como estas salen a menudo del entorno más cercano de quienes vienen arrastrando una depresión disimulada durante años o “depresión sonriente”. Y con éxito, porque hasta los propios familiares no salen de su asombro cuando la tristeza contenida cae finalmente por su propio peso. ¿Pero qué es y cómo puede hacer tanto daño al bienestar mental de quien la padece?

El término “depresión sonriente” hace referencia a cuadros depresivos que cursan con sintomatología típica de la depresión, pero que en el sujeto diagnosticado muestra un afán de ocultamiento, de manera que “las personas que lo rodean no perciban el malestar al que está haciendo frente», explica Vanessa Rodríguez Pousada, profesora colaboradora del máster universitario de Psicopedagogía de la UOC (Universitat Oberta Catalunya). «Actualmente, vivimos en una sociedad en la que ser feliz es un imperativo», afirma Rodríguez Pousada. «Junto a esta dictadura de la felicidad ha ido acrecentándose un individualismo desde cuya óptica se tiende a minusvalorar las circunstancias personales, sociales y estructurales de un sistema decidido a convencernos de que la salud y la enfermedad están ligadas casi exclusivamente a deficiencias psicológicas personales; donde la autodeterminación y las capacidades propias son los ejes vertebradores de nuestro bienestar. Así, se presupone que estar bien o no estar bien depende exclusivamente de uno mismo», apostilla.

De la depresión a la culpa

Como explica la profesora colaboradora de la UOC, “estas personas se sienten culpables por experimentar malestar, y al hecho de padecer una depresión, se le sumaría la culpa por sufrirla, asumiendo que nosotros mismos somos los responsables, y, en una doble vuelta de tuerca, se pasaría de la depresión a la culpa, y de la culpa a la vergüenza», indica. «En consecuencia, la depresión representaría para estos pacientes la propia incapacidad para hacer frente a algo que deberíamos saber manejar y se revela como un significante de la propia debilidad». El resultado que esto puede tener es precisamente el de no mostrar las verdaderas emociones y aparentar felicidad de cara a los demás.

Suelen ser personas perfeccionistas, que con frecuencia toleran peor los fallos, y perciben la depresión como una debilidad y una carencia personal.

Las RRSS, un campo abonado

Las redes sociales han atrapado a muchas personas a su abismo. “Vivimos en una sociedad donde constantemente tenemos que demostrar a los otros que tenemos una vida perfecta. En mi opinión, esto se refuerza a través de las redes sociales», explica Ferran Marsà Sambola, profesor colaborador de los Estudios de Psicología y Ciencias de la Educación de la UOC.

Las redes sociales no ayudan a que se muestren las emociones reales, por lo que son terreno abonado para estas personas. Más bien existe una tendencia a mostrar la parte exitosa de uno mismo, magnificándola y enalteciéndola de forma considerable. «Al mismo tiempo, la comparación entre la propia vida y la supuesta vida de los demás, brota como un juego de espejos engañoso, en el que la realidad se difumina. Las redes sociales pueden aparecer aquí como autopistas por las que transitar bajo la ocultación del malestar. En este caso, podrían asomar como el compañero de viaje ideal de la depresión sonriente”, afirma Rodríguez Pousada.

Los signos externos

  1. Tienen más apetito.
  2. Duermen en exceso.
  3. Tienen una mayor sensación de pesadez en brazos y piernas.
  4. Muestran rechazo a las críticas de las personas de su entorno.
  5. Incluso pueden mostrar pérdida de interés en actividades que antes eran satisfactorias para ellos.

Apúntate a nuestra newsletter

* La newsletter para farmacéuticos es para uso exclusivo de profesionales sanitarios (médicos, enfermeros, farmacéuticos) involucrados en la prescripción o dispensación de medicamentos, así como profesionales de la industria farmacéutica y la política sanitaria. Publicitario Farmacéutico SL no se hace responsable del uso de esta newsletter por parte de profesionales no cualificados.

Avatar

Paula Rivero

Soy de la primera promoción de Periodismo que salía del "horno" de Sevilla (en todos los sentidos), allá por el año 94, estudios que completé con los de Historia Contemporánea, licenciándome en...