31 años después de su última aparición en España, la llamada peste porcina africana reemergía el pasado mes de diciembre en la sierra de Collserola (Barcelona), provocada al parecer por un bocadillo abandonado. El temor de los ganaderos a su propagación estaba bien fundado, ya que se trata de una enfermedad rápidamente transmisible y con una altísima mortalidad en el ganado porcino.
La peste porcina africana (llamada así por su procedencia, ya que es originaria del África subsahariana) es una enfermedad hemorrágica y vírica muy contagiosa que afecta sólo a cerdos y jabalíes. Es causada por un virus muy resistente de la familia asfaviridae, el Asfivirus (ASFV) que solo infectan a suidos (cerdos domésticos y jabalíes), provocando fiebre alta, hemorragias internas, conjuntivitis, cianosis en las orejas y el hocico, vómitos y piel enrojecida, provocando una mortalidad que puede llegar al 100%. Aunque no se transmite a humanos ni se contagia por consumir carne de cerdo, es muy peligrosa para el sector ganadero por su rápida propagación y por las pérdidas económicas enormes que provoca.
¿Afecta a las personas?
- No, el virus no se transmite a humanos por consumir carne de cerdo: es una enfermedad no zoonósica, es decir, las personas no son susceptibles de infección, ni por contacto, ni por ingestión de productos, según ha informado el Ministerio de Agricultura y Pesca en un comunicado.
- En cambio, el virus puede pasar de un animal infectado a uno sano a través de la orina, heces o incluso garrapatas. También puede transmitirse a través de objetos contaminados (ropa, calzado, instrumentos de granja) y en el caso del jabalí, al ser un animal carroñero, se puede contagiar al comer restos de animales infectados. Esto puede provocar graves problemas en la fauna salvaje, ya que los jabalíes pueden mantener el virus circulando en el medio natural, de ahí que cuando se detecta un foco afectado por este virus se suspenda la caza para evitar su propagación.
Pero…
- Es muy peligrosa para el sector ganadero, ya que implica una mortalidad muy alta en cerdos y una rápida propagación. Con el agravante de que el virus puede sobrevivir semanas o meses y que vivimos en un mundo globalizado en el que el transporte de animales, productos y personas hace que el virus pueda llegar a todos los rincones del mundo en poco tiempo.
- Provoca pérdidas económicas enormes, ya que España es el primer productor de porcino en la UE y el tercero mundial y si la peste porcina africana llega a una explotación doméstica de cerdos, todos los animales tendrían que ser sacrificados y sus cadáveres destruidos. Las granjas deban contar con mallados y medidas de bioseguridad para evitar por todos los medios que se produzca el salto, de ahí que se estableciera un perímetro de concentración de 20 kilómetros desde donde se encontraron los primeros jabalíes infectados.
- Supone un riesgo enorme para las exportaciones, sobre todo a países que no aceptan la regionalización de las importaciones de cerdo llegadas de España, como es el caso de Japón, México o Reino Unido. China en cambio, nuestro principal cliente, ha limitado las importaciones a los productos de la provincia de Barcelona, la zona afectada por el momento.

