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Si sufres somniloquia, es decir, hablas mientras estás dormido, no te preocupes, no es un trastorno propiamente dicho; ni suele implicar enfermedad subyacente alguna, ni física ni psicológica. Eso sí, es tema de interés para los investigadores ya que puede aportar información sobre el funcionamiento de la memoria durante el sueño.
El fenómeno en sí mismo implica que una persona, mientras está dormida y sin despertar, emite sonidos, palabras; llegando incluso a pronunciar enunciados completos que pueden tener sentido. De hecho, en ocasiones, cuando se le contesta al afectado durante un episodio de somniloquia, éste puede responder a su vez manteniendo una conversación relativamente coherente; explica el doctor Alejandro Guillén, de la Cátedra de Investigación de Sueño de la Universidad de Granada-Grupo Lo Monaco.
La persona que está hablando en sueños no es consciente de este hecho y cuando despierta no suele recordar la conversación que ha mantenido. Otra de las características curiosas de este fenómeno es que quien lo sufre puede entonar adecuadamente; realizar inflexiones con la voz, y no se limita a un lenguaje robótico y plano. Eso sí, la información que comunica no tiene por qué ser veraz. En estos estados se puede mentir o decir cosas sin ningún sentido.
En la fase REM
Pese a que este fenómeno puede darse en cualquier fase del sueño, aparece con mayor frecuencia en la fase de sueño paradójico (REM). Habitualmente se produce asociado a sueños, en los que la persona verbaliza palabras o frases adecuadas al contenido del sueño.
Somniloquia: infrecuente y benigno
A pesar de ser un fenómeno que genera gran interés entre los investigadores, no constituye uno de los principales focos de estudio del sueño por varios motivos. El primero de ellos es que se trata de una situación infrecuente. Además, no se vincula directamente con ningún trastorno físico o psicológico, ni supone ningún problema para la persona cuando se da de forma aislada. Por otro lado, su estudio presenta dificultades ya que es un fenómeno difícil de producir en condiciones de laboratorio.


Hablar en sueños resulta un fenómeno interesante para los expertos ya que se produce una conducta motora (muy reducida) que; además -explican los expertos de la Cátedra de Investigación de Sueño- implica toda una serie de mecanismos mentales: lenguaje, sentido en las frases, vocalización.
Además, la investigación de este trastorno puede aportar mucha información sobre cómo funciona la memoria durante el sueño al estudiar; cómo las personas hablan y manejan información recogida durante el día mientras duermen. Nuestros cerebros no son menos activos cuando dormimos, como se pensaba, son activos solo que de manera diferente. El cerebro en vigilia recolecta información, mientras que el cerebro dormido consolida lo recolectado, sería una especie de paso de “grabar” a “editar”. Es decir, el sueño refuerza nuestra memoria.