¿Quieres un cachorro? Cómo elegir a un buen criador

Está decidido. Tras meditar y pensar en todos los pros y contras de tener un cachorro de perro en nuestra familia, teníamos dos opciones: coger uno abandonado en una perrera o asociación; o adquirir un cachorro de una raza determinada. Finalmente, nos decidimos por la segunda opción en un determinado criadero. Estos son nuestros consejos para quien se decida a hacer lo mismo.

A la hora de adquirir un perro procedente de un criadero, es importante saber dónde buscar: en internet encontraremos criadores y anuncios de venta o donación de cachorros de raza, pero no toda la información que encontremos es fiable. Antes de decidirnos debemos considerar distintos aspectos que son muy importantes. Hacerlo a la ligera nos puede traer problemas el día de mañana. Tener un perro debe ser una decisión muy meditada, pues adquirimos una enorme responsabilidad. Un perro vive en torno a los 15 años y tenemos que estar seguros y comprometernos a ofrecerle la mejor vida. Él nos lo pagará con creces.

Con todas las garantías sanitarias

Este es el aspecto más importante a tener en cuenta antes de adquirir un cachorro. Un buen criador ofrece cachorros adecuadamente vacunados y desparasitados, con su microchip implantado y su pasaporte veterinario en regla. También, un buen criador selecciona los reproductores antes de criar, y ante todo se asegura de que no tengan enfermedades que puedan ser hereditarias, como displasia de caderas y codos, taras oculares etc. La documentación que se nos entregue del cachorro, debe acompañarse de los certificados correspondientes de los padres que descarten estas enfermedades.

¿Qué precio es razonable?

El precio de un buen cachorro depende de muchos factores. Si nos decidimos por un buen criador que nos ofrezca las máximas garantías sanitarias, que haya seleccionado a los mejores reproductores y cuyos perros estén criados y vivan en las mejores condiciones, el precio superará los 500 euros inevitablemente. De hecho, un muy buen perro de raza puede ascender a 1000 euros. Desde mi punto de vista, anuncios de perros por 100 euros no transmiten confianza alguna. Otro aspecto a considerar es el pedigree. Aunque para muchos nuevos propietarios el pedigree puede ser secundario, de hecho tiene una gran importancia, ya que es un documento que certifica la autenticidad de la raza y nos proporciona información sobre los progenitores de nuestro cachorro en hasta cinco generaciones.

Para salir de dudas… Mejor una visita

Es fundamental no dejarnos guiar por bonitas fotos publicadas en internet o enviadas por el criador. Lo mejor es concertar una cita y desplazarnos hasta las instalaciones para ver a los padres, ver cómo viven, si proceden de una granja en lugar de una crianza familiar, analizar las condiciones higiénicas en las que viven, cómo es su alimentación, sus relaciones con el grupo, etc.

Conocer al criador también es un detalle importante, ya que, si es amante de una determinada raza, pertenecerá a su club representativo y seguramente participará en exposiciones caninas en las que mantendrá contacto con otros criadores y se preocupará por seleccionar a los mejores ejemplares, no sólo los más sanos, sino los mejor formados morfológicamente y los que tangan mejor carácter (el propio de cada raza). Igualmente, es importante que el criador se muestre abierto a permanecer en contacto con nosotros una vez tengamos al cachorro en casa, de manera que podamos consultarle dudas sobre su alimentación etc.

Por Manuel Vázquez, farmacéutico titular de Farmacia Veterinaria