Muy vulnerable
La piel de esta zona es hasta cinco veces más fina que la del rostro y por ello requiere atención específica.
El contorno de ojos es una zona corporal “sufridora” por antonomasia, tanto por su vulnerabilidad frente a las agresiones ambientales como por su carácter “delator” del paso del tiempo. Por ello, es imprescindible conocer bien sus peculiaridades y, sobre todo, prestarle la atención que requiere, proporcionándole los activos cosméticos que necesita de forma específica.
No, el contorno de ojos no es en absoluto una zona cualquiera, sino que tiene una serie de peculiaridades que la hacen única y, por tanto, exige cuidados concretos y específicos. Los expertos de Germinal trazan un perfecto “retrato robot” de esta área facial: “la piel del contorno de ojos es extremadamente fina (hasta cinco veces más que la del rostro, la cual, a su vez, es cinco veces más fina que la del resto del cuerpo). Además, está sometida a la tensión de 22 músculos en constante movimiento debido a nuestros gestos y expresiones faciales, y ‘sufre’ 10.000 parpadeos al día”.
Por todo ello, se trata de una “gran acusadora”, ya que es una de las primeras partes del cuerpo en reflejar el paso del tiempo, además de acusar de inmediato la existencia de estrés, la falta de sueño o una mala alimentación.
Cinco “puntos de vista” a abordar
Desde Germinal concretan en cinco los problemas más comunes que presenta este contorno y que son el objetivo principal al que se dirigen los cuidados cosmético-estéticos específicos: las arrugas, las patas de gallo, las bolsas, las ojeras y la falta de firmeza: “La aparición de arrugas y patas de gallo, muchas veces de manera prematura, es consecuencia inevitable del parpadeo. Las bolsas reflejan la retención de líquidos, sobre todo al levantarse, debido principalmente a la relajación de los músculos oculares por la noche. Las ojeras pueden ser de color marrón (en ese caso, se trata de una hiperpigmentación de la piel por exceso de melanina) o de color violáceo (que estarían provocadas por la mala circulación)”.
En cuanto a la falta de firmeza, para los especialistas se trata quizás de uno de los problemas más importantes, tanto por sí mismo como por el hecho de que suele acompañar a los otros cuatro problemas, y explican que está producido por una menor dotación de las fibras de colágeno y elastina en la zona, de ahí que sea más evidente con la edad.
Productos específicos: cuándo y cómo
Teniendo en cuenta todas estas “señas de identidad”, es obvio que el contorno de ojos necesita de mimos y cuidados diarios, pero, ¿cuál es el momento adecuado en el que hay que empezar a incluir esta zona en la rutina cosmética habitual?
Nos contesta el doctor Daniel Nieto, especialista en Dermatología Médico-Quirúrgica del IMR (Instituto Médico Ricart): “Lo cierto es que no hay una edad determinada a partir de la cual sea “obligatorio” usar un producto para el contorno de ojos, puesto que la inclusión de este gesto en la rutina de cuidados diarios va a depender de cada caso individual. Es una cuestión en la que intervienen factores como el género, el tipo de piel o la existencia de patologías que puedan afectar a esta zona del rostro”.
“Dicho esto- añade el experto- la mayoría de los autores coinciden en que el envejecimiento celular se inicia a partir de los 25-30 años, con lo que, a partir de ahí, existiría una mayor indicación para acudir a un especialista y empezar a plantear un tratamiento preventivo, en caso de que aún no haya alteraciones en la zona, o aplicar un tratamiento activo si las huellas de la edad ya han hecho acto de presencia en el contorno de ojos”.
La aplicación, un gesto clave
Según el doctor Nieto, para que el tratamiento cosmético de las alteraciones de esta zona sea más efectivo existen algunas pautas que deben seguirse:
- “Previamente a la aplicación del producto es conveniente realizar una limpieza del contorno de ojos, utilizando para ello cosméticos adecuados y específicos para esta zona”.
- Es muy importante aplicar la cantidad adecuada de producto: hay que tener en cuenta que, en general, el contorno de ojos es un área no demasiado grande con una piel muy fina. Por eso, una pequeña cantidad aplicada con la yema de los dedos suele ser suficiente.
- Es conveniente acompañar la aplicación del producto de un suave masaje para extenderlo de manera uniforme, asegurando así que llegue a todas las zonas de acción.
- Después del masaje, se pueden dar pequeños toques, para favorecer la absorción del producto.
Ojo a estos errores
Directamente relacionados con lo anterior están los principales errores que se suelen cometer en la aplicación de los productos del contorno y el tratamiento de esta zona. Daniel Nieto comenta los más frecuentes:
- “Conformarse” con cualquier opción. “El error más común es aplicar un producto que no sea el adecuado para el problema en cuestión, especialmente cuando se trata de las ojeras. Por ello, es necesario consultar a un especialista que oriente respecto a las peculiaridades del tipo de ojera que se tiene y, sobre todo, que descarte que exista una patología de base que pueda afectar a la zona del contorno de ojos”.
- Aplicar “sin medida”. “Asimismo, no se tiene todo lo en cuenta que se debería que el contorno de ojos es una de las zonas con la piel más fina de todo el cuerpo, por lo que tanto la cantidad como el tipo de producto tienen que estar adaptados a estas características”.
- Saltarse los “preliminares”. “Otro error habitual es no limpiar la zona antes de aplicar cualquier producto, para así retirar cualquier resto cosmético que pueda estar depositado en su piel”.
Cosmética antiojeras y antibolsas: ¿es lo mismo?
Aunque muchas opciones aúnan en un mismo producto la solución a ambos problemas, para Daniel Nieto es importante tener claras las diferencias entre las bolsas y las ojeras:
“Las ojeras y las bolsas son dos situaciones que pueden afectar al contorno de ojos. Sus síntomas no son los mismos y, por lo tanto, los productos destinados al tratamiento de una y otra van a ser diferentes y buscan objetivos distintos para tratar dichas manifestaciones”:
- “En el caso de las ojeras, normalmente lo que vemos es la aparición de un depósito de pigmento, un aumento de la vascularización superficial o una combinación de ambos elementos en la zona de la ojera. Se deben a un componente genético, a malos hábitos de sueño o a alguna patología que se manifiesta en esta localización. Los productos antiojeras, por tanto, están destinados a solucionar ese exceso de pigmentación, mejorar la microcirculación de la zona y ocultar estos síntomas”.
- En cuanto a las bolsas, el doctor Nieto señala que se producen por un aumento de líquido o grasa en la zona periocular, que se intensifica como consecuencia de la falta de firmeza o flacidez: “La distribución de los ligamentos y de los músculos de esta área facial favorecen la formación de bolsas en esta localización. Los productos específicos para las bolsas van dirigidos principalmente a tratar de reducir el acúmulo y disminuir sus manifestaciones”.
¿Se pueden “camuflar” las bolsas?
Los expertos coinciden en que la única solución definitiva para eliminar las bolsas debajo de los ojos es la blefaroplastia, un tipo de cirugía estética que tiene como objetivo eliminar el exceso de grasa y piel en esta zona. Pero por suerte, hay también estrategias, cosméticas y de otro tipo, que pueden camuflarlas o minimizar su aspecto. Estas son algunas de las más recomendables, de acuerdo con el doctor Nieto:
“Algunos de los métodos que podemos utilizar para mejorar el aspecto de las bolsas se basan en tratar la retención de líquidos que se deposita en esta zona. Entre los más efectivos se encuentran”:
- El uso de aplicadores fríos (productos en roll-on, compresas o discos enfriados en la nevera, parches refrescantes o, simplemente, un cubito de hielo) en esta zona para reducir la inflamación
- Dormir boca arriba, con el cabecero de la cama levemente elevado.
- Dejar de fumar, para así prevenir el envejecimiento celular y el estrés oxidativo, que agravan el problema de las bolsas.
- Y, por supuesto, el uso regular de productos cosméticos específicos para esta zona.
- En cuanto a los activos y productos cosméticos (tratamientos tópicos) más utilizados en el abordaje del problema de las bolsas en los ojos, Daniel Nieto destaca los siguientes: los que incluyen ácido hialurónico, por el efecto antiaging e hidratante de esta sustancia; los que incluyen diferentes sustancias antioxidantes (niacinamida, vitamina C); productos con efecto tensioactivo; y en el caso de que las bolsas vayan acompañadas de arrugas finas en la zona, el uso de retinol o derivados a baja concentración, ya son activos con un potente efecto anti-edad.
¿Por qué se caen (tanto) las pestañas?
Sí, las pestañas tienen fecha de caducidad y, además, son muy frágiles y están expuestas a una serie de factores y circunstancias que hacen que su duración se acorte aún más.
“La vida de la pestaña es de tres a seis meses. Sigue el mismo ciclo que cabello: en la fase anágena se arraiga al folículo piloso; en la catágena, detiene su desarrollo y el bulbo sube a la superficie de la piel; y en la telógena está lista para caerse, ya que se ha formado otro pelito que la expulsará. Por tanto, nuestras pestañas también pasan por su ciclo de crecimiento, reposo y caída, que forma parte de su proceso natural de renovación. Por otro lado, hay que tener en cuenta que cada pestaña tiene su propio ciclo, lo que significa que no todas se caen al mismo tiempo”, explica Rosa Roselló, directora de formación de Druni.
A este ciclo natural se suman algunos factores que pueden acelerar este proceso y, también, hacer que las pestañas pierdan volumen y que luzcan más delgadas: desde la contaminación ambiental hasta un exceso de maquillaje, pasando por un desmaquillado excesivamente agresivo o la costumbre de frotarse los ojos con frecuencia. Todos ellos pueden debilitar las pestañas y provocar su caída prematura.
Maquillaje de ojos: embellecer sin dañar
La máscara de pestañas es uno de los cosméticos más “agradecidos” en el sentido de que con un solo toque y en apenas unos segundos puede transformar totalmente no sólo el aspecto de la mirada sino también el de todo el rostro. Sin embargo, hay que elegir el producto adecuado y, sobre todo, aplicarlo -y eliminarlo- correctamente.
De ello advierte Rosa Roselló: “El uso excesivo de cosméticos para pestañas puede resultar perjudicial. Aunque un toque de máscara puede realzar nuestra mirada, el uso constante de máscaras waterproof y, sobre todo -y más importante- una eliminación inadecuada al desmaquillarlas puede causar una rotura de las pestañas y, en última instancia, favorecer su caída”.
Por tanto, una premisa clave a seguir es eliminar la máscara waterproof con un desmaquillante de ojos específicamente formulado para este tipo de cosméticos y, en cualquier caso, siempre retirar suavemente el maquillaje de ojos al final del día, con productos formulados para la zona del contorno y la ayuda de discos de algodón (uno para cada ojo) y bastoncillos impregnados en estos productos para eliminar los restos más reticentes. “Asimismo, hay que tener en cuenta que ciertos tratamientos cosméticos, como el uso de rizadores o las extensiones de pestañas, pueden dañar las pestañas naturales y acelerar su caída”, apunta la directora de formación de Druni.
Más largas, más fuertes, más espesas
- En cuanto a los principios activos más efectivos para acelerar el crecimiento de las pestañas y protegerlas de todos estos factores, hay uno que desde hace mucho tiempo lidera el ranking: el aceite de ricino. “Conocido por su capacidad para fortalecer e hidratar, se ha ganado su lugar como favorito en el mundo de la belleza. Su componente estrella, el ácido ricinoleico, estimula el crecimiento de las pestañas y previene su rotura”, comenta Rosa Roselló.
- Otro activo potente es el aceite de almendras dulces, que aporta una dosis de vitamina E, nutriendo las pestañas y promoviendo su salud.
- El aceite de coco, con sus ácidos grasos esenciales, también fortalece y protege las pestañas frente al daño medioambiental.
- “La biotina (vitamina B7) es otro aliado poderoso, ya que, al igual que ocurre con el cabello, favorece el crecimiento de las pestañas, reforzándolas desde la raíz”.
- Los péptidos (pequeñas proteínas que nutren y fortalecen) trabajan en conjunto con las vitaminas antioxidantes, como la E y el pantenol, para fortalecer y estimular el crecimiento saludable de las pestañas.
- Otros activos a tener en cuenta, según los expertos de Druni, son los extractos botánicos (ginseng, caléndula, camomila), que proporcionan propiedades regenerativas y calmantes.
Atención, ojos sensibles
Según se explica desde Mia Cosmetics, en el caso de los ojos sensibles, encontrar una máscara de ojos adecuada puede suponer todo un desafío, y por ello ofrecen una serie de consejos para acertar en esta elección:
-Ir sobre seguro. Siempre hay que elegir un producto que hay sido testado oftalmológicamente para ojos sensibles, pues es un claro indicador de que la máscara ha sido probada, funciona y no irrita. En este sentido, hay que recordar que una máscara de pestañas que se venda en farmacias ofrece todas las garantías de seguridad.
-La prueba previa. Para evitar “disgustos”, los expertos aconsejan aplicar el producto en una pequeña zona de las pestañas y esperar un tiempo prudencial; parpadear varias veces y, si no irrita ni molesta, extenderla por todas las pestañas.
-Mantener las distancias. Al aplicar la máscara es importante evitar acercarla demasiado a la línea de las pestañas. En vez de eso, se debe intentar mover el cepillo hasta la mitad de las pestañas y, a continuación, desplazarlo suavemente hacia las puntas.
-Comprobar los ingredientes. Un “truco” muy revelador: si la máscara tiene una concentración alta de materias primas de origen natural, es más probable que no irrite.
Y los párpados, también
Dentro de ese “ecosistema” de sensibilidad que caracteriza al contorno de ojos, los párpados son una zona “sensible plus”, ya que su piel es extremadamente fina, lo que la convierte en más susceptible al daño. Además, contiene menos grasa o glándulas sebáceas que otras áreas, lo que da como resultado una piel más seca y que se irrita con más facilidad.
Desde Laboratorios Viñas se incide en la importancia de utilizar fórmulas respetuosas con las características de la piel de esta zona, especialmente en épocas de “alto riesgo”, como el frío y las condiciones ambientales adversas o la primavera (los párpados acusan especialmente los efectos de los síntomas oculares de las alergias).
Asimismo, los expertos ponen el foco sobre un aspecto que no se suele tener en cuenta en los cuidados del contorno de ojos: “Hay que prestar atención especialmente a la higiene de los párpados, debido al impacto que esta tiene en la salud de la superficie ocular. Para ello, se aconseja utilizar un producto limpiador de alta tolerabilidad, que elimine el exceso de sebo y descamación y de otras secreciones oculares y que proporcione un efecto calmante y prevenga la irritación y el picor”.
Una mirada limpia
1-Radiance Anti-Age Lifting Eye Contour, de Germinal. Producto 4 en 1 para tratar los principales problemas del contorno, descongestionar y aportar luminosidad.
2-Iraltone 2 en 1 Serum Potenciador de Pestañas y Cejas, de Cantabria Labs. Serum innovador que mejora la longitud, la curvatura y el crecimiento de pestañas y cejas.
3-Diopti Fluido Corrector de Ojeras, de Lierac. Con textura ligeramente pigmentada para corregir todo tipo de ojeras, incorpora vitamina C 100% de origen natural.
4-Sensitive Eyes Supervolume Mascara, de Mia Cosmetics. Con una formulación donde priman los ingredientes de origen natural, está diseñada para ojos sensibles y delicados.
5-Belcils Espuma Limpiadora, de Laboratorios Viñas. Especialmente formulada para la limpieza diaria de los párpados de los ojos sensibles, de fácil aplicación y efecto calmante.
6-Eye-Patch Ultra-Hidratante, de Talika. Parches con efecto flash para el contorno de ojos a base de bio-celulosa de ácido hialurónico y extractos probióticos.