Únete a nuestra comunidad
Toda la actualidad del mundo de la salud y la farmacia en Consejos de tu Farmacéutico.
Además, puedes seguirnos en nuestras redes sociales:
Durante mucho tiempo se ha pensado que los ronquidos son algo normal, e incluso sinónimo de buen descanso. Nada más lejos de la realidad, dicen los otorrinos. Por suerte, se trata de un problema que tiene solución en la mayoría de los casos.
Si roncas de manera habitual, ten por seguro que algo no marcha bien durante el sueño. De hecho, según indican los expertos de la Comisión de Roncopatía y Trastornos del Sueño de la SEORL-CCC, los ronquidos a menudo indican una patología de base que hay que diagnosticar y tratar, por las consecuencias que puede tener en tu salud general.
Estas son algunas de las causas más comunes sobre las que podemos actuar:
1. Una de las causas más comunes de los ronquidos es la obesidad. La acumulación de tejidos y grasas en la zona del cuello es mayor en una persona con sobrepeso, ya que oprime las vías respiratorias y dificulta la respiración. Por eso, cuando el problema viene determinado por el peso, el tratamiento más eficaz es adelgazar. Si la pérdida de unos kilos viene acompañada de la práctica regular de ejercicio, las posibilidades de que los ronquidos desaparezcan son mayores.
2. Otros factores que influyen en la roncopatía son el consumo de alcohol y tabaco, sobre todo antes de irse a dormir. Las bebidas alcohólicas relajan los músculos de la boca y de la garganta, que son los encargados de mantener despejadas las vías respiratorias, por lo que dificulta la entrada y salida del aire que se respira. Por tanto, es conveniente evitarlos por la noche. Por otro lado, fumar irrita la membrana mucosa de las fosas nasales, de la faringe y bloquea los vasos sanguíneos que van a los pulmones, por lo que será complicado respirar por la nariz al reducirse el flujo de aire.
3. También el consumo de ciertos medicamentos pueden provocar y agravar los ronquidos: los sedantes, somníferos y algunos fármacos actúan como relajantes musculares, por lo que es conveniente hablar siempre con el médico antes de tomarlos.
Soluciones profesionales
¡Funcionan!
*Por la Comisión de Roncopatía y Trastornos del Sueño
1. Cintas para el mentón: este aparato, también llamado correa antirronquidos, sujeta esta parte de la cara, ayudando a mantener la boca cerrada e impedir que se abra mientras se duerme.
2. Otra opción es la férula de avance mandibular. Este método lo utilizan las personas que roncan por vibración de la lengua. Se trata de una funda de plástico fabricada por un protésico dental especializado, que encaja en la boca y que empuja la mandíbula hacia delante, lo que ayuda a aumentar el espacio en la parte posterior de la garganta y, de esta forma, facilitar el paso del aire.
3. Presión Positiva Continua en la vía aérea (CPAP): cuando la situación es más grave y la persona que ronca padece apnea obstructiva del sueño, es el tratamiento más habitual. Se trata de un respirador artificial o máscara nasal con la que se introduce aire a presión durante toda la noche para facilitar la respiración, puesto que mantiene despejada las vías respiratorias, eliminando los ronquidos.
Sigue leyendo