Consejos para vivir "a tope" tu San Valentín
Si quieres reavivar el amor en tu relación de pareja, te proponemos estas "llamaradas" para hacer de tu cita de San Valentín la más inolvidable de cuantas hayas vivido.
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El trabajo extenuante, las preocupaciones del día a día, los avatares con los hijos y las tareas del hogar son un cóctel muy habitual en muchos hogares y constituyen razones «poderosas» que nos hacen relegar el amor de pareja a un segundo plano, prestando poca atención a los detalles.
Para reavivarlo, el día de San Valentín es el «reseteo» que todos necesitamos, el momento para reflexionar y preguntarnos: «¿Hago a mi pareja feliz? ¿Le dedico el tiempo que necesita? ¿Tengo detalles frecuentes con ella? ¿Dedicamos tiempo a estar juntos y solos?
Después de hacer este «examen de conciencia», te proponemos poner el marcador a cero con una serie de consejos saludables con los que vuestra relación de pareja recargará pilas y que os permitirán retomar vuestra relación de amor con más fuerza que nunca allí donde la dejasteis.
¡No te abandones! La importancia del cuidado personal
Lógicamente, si quieres gustar, necesitas gustarte primero a ti mismo y estar satisfecho con la imagen que proyectas. Es decir, cuidar tu relación amorosa es sinónimo de cuidarte a ti mismo.
Y cuidarse uno mismo empieza por comer saludablemente, por hacer ejercicio físico diario, por dormir 8 horas al día, por disminuir el consumo de alcohol y dejar el tabaco, por evitar los excesos y controlar el peso. Es el momento de empezar con una dieta equilibrada, preferentemente mediterránea, rica en frutas y verduras, pescados azules (ricos en ácidos grasos omega 3), aove, cereales integrales, carnes magras, legumbres y lácteos, y también de dejar tiempo para el ocio y las relaciones sociales, de conectar con la naturaleza… En definitiva, se trata de poner en práctica este largo etcétera, desde YA, con tu pareja.
Recuerda que «abandonarse» puede ser el peor de los errores en una relación amorosa.
Nuestra «guía para enamorados»
También en la esfera de lo emocional, el día de San Valentín puede ser el comienzo de una nueva etapa en la que poner «a salvo» todo aquello que creías que se había enfriado para siempre:
- Organízate para el gran día: arréglate como si fuera tu primera cita y organiza ese capricho del que tantas veces habéis hablado. Puede ser un restaurante, una escapada, un hotel. Aprovecha para ir de tiendas y estrenar ropa nueva, pedir cita en la peluquería, reservar en ese restaurante al que hace tiempo que queréis ir o encargar las flores o ese regalo con el que le vas a agasajar en el gran día.
- Programa futuros momentos de ocio juntos: pueden ser semanales, mensuales, anuales… se trata de programar espacios para la pareja, que os ayuden a sentar las bases de una relación más sólida y cimentada en el amor mutuo. No dejes los buenos propósitos sólo para el día de los Enamorados.
- Pon en valor lo que te gusta del otro: fíjate más en sus virtudes y menos en sus defectos.
- Fomenta la comunicación y el respeto: no dejéis nada en el tintero. Una relación de pareja debe ser sincera y sostenerse sobre la base de una buena comunicación. Si tienes algo que no te gusta, dilo y no lo dejes para mañana. La comunicación es la mejor baza con la que contamos para que las relaciones duren y crezcan en el amor.
- Promueve los encuentros sexuales: las relaciones sexuales unen mucho a la pareja, pero a veces, las obligaciones y multitareas del día a día nos llevan a la cama cansados y extenuados. En esto, como en todo, es cuestión de empezar. Las relaciones sexuales, además de fomentar la autoestima, estrechar vínculos y mejorar la apariencia y las ganas de cuidarse, reducen el estrés y ayudan a dormir mejor, protegen frente al cáncer de próstata, disminuyen las molestias de la menopausia, tienen beneficios a nivel cardiovascular y respiratorio, fortalecen el suelo pélvico, ayudan a quemar calorías, fortalecen los huesos y activan y protegen el cerebro. Además, el deseo sexual es directamente proporcional a las veces que practicamos sexo con tu pareja: si se fomenta, crece y si se deja en un segundo plano, disminuye.
- Fomenta la empatía y trata de ponerte siempre en el lugar del otro. Respetando sus límites tu pareja respetará los tuyos.
- Uno puede tener un mal día, no te tomes los reveses como como algo personal.
- Deja también espacios para la autonomía y para encontrarte contigo mismo. Hay momentos en los que estar solo también es necesario.
- Si estáis pasando por un mal momento y vuestra relación se encuentra en un callejón sin salida, puede ser conveniente contratar la ayuda profesional de algún psicólogo o centro de orientación especializado en ayuda a la pareja.
Detalles «de farmacia» para triunfar
Y ya «metidos en faena», qué mejor punto de partida para empezar a cuidar los detalles que este día de los enamorados. Y aunque los detalles «inmateriales» son los que más nos gustan, quién le va a hacer ascos a un menú para dos preparado con mucho cariño, a unas flores o unos bombones, a un bono para un spa o gimnasio, a un set de cuidados masculinos, a un aroma para el hogar o perfume de venta en farmacia o a un buen producto cosmético de dermofarmacia con retinol, con bakuchiol o con ácido hialurónico, detalles todos con los que acertarás seguro en tu regalo.
Ya sabes, aprovecha la cercanía de tu farmacéutico de confianza y sigue sus consejos a la hora de elegir el que más se adapte a tu pareja. Tu triunfo para este día de San Valentín estará asegurado.